Varios grupos de personas se habían puesto en marcha desde ciudades limítrofes como Mataró a 30 Km de Barcelona, Tarrasa o Sabadell, el sábado caminando toda la noche hacia Barcelona.
Pese a estar marcada para las 17:00 horas a las 16:00 la plaza de Cataluña así como varias calles alrededor ya registraban un lleno total. Miles de personas de todas edades y condición reafirmaban así, una vez más, de forma contundente, su creciente desazón por la situación actual del país; un déficit democrático importante, una corrupción política creciente, unas medidas económicas centradas en el recorte y carga contra los mas débiles, los que precisamente no son causa de la crisis, los desahucios y una larga lista de oprobios.
Significó esta manifestación, una vez más, una afirmación clara de la no violencia demostrando su desarrollo que no se puede incriminar este movimiento culpándole por las actitudes violentas de una parte de la población.
También evidenció que no se trata de un movimiento juvenil; familias enteras, personas de diferentes edades y condición han sido los componentes de una manifestación que duró más de cuatro horas en su transcurso.
Iniciamos la manifestación a las 16:00 horas en Passeig de Gracia/Plaza Catalunya y a las 17:00 se puso en marcha pasando por la calle Fontanella, luego Vía Layetana, Passeig de Colom acabando en Plà del Palau.
Miles de personas – unas ciento cincuenta mil – desbordaron todas las previsiones, algo reconocido inclusive por el denostado titular del Departament del Interior de la Generalitat de Catalunya Felip PUIG.
En el transcurso por la Vía Layetana pasamos por delante del edificio de la Policía Nacional resguardado por sendos vehículos de los Mossos d’Esquadra, sin que ello provocase ningún altercado o siquiera mención especial por parte de los manifestantes.
Por el aire la vigilancia continua de varios helicópteros de la policía que a su paso provocaba el levantamiento de manos por parte de los manifestantes y multitud de pedidos de “auxilio nos roban la democracia” o “el peligro no está aquí está en el parlamento”…
Una jornada que todos esperamos haga reflexionar a los políticos y les concite a tomar las medidas pertinentes así como proceder con los cambios de rumbo necesarios, aunque a tenor de las manifestaciones de partidos y autoridades vertidas en las últimas horas lleva a pensar que su ceguera es crónica…